1. MEDITA O PRACTICA YOGA
Hace 8 años empecé a practicar yoga, pero de manera muy esporádica:
durante un par de semanas lo hacía 3 veces a la semana, luego lo dejaba y
volvía a retomarlo un mes después…
Pero hace 6 meses comencé a acudir a clases de yoga dos veces por
semana, y a practicarlo yo sola en casa el resto de días, y el impacto que ha
tenido en mi vida ha sido enorme.
El yoga hace que tu mente se aleje de todos tus problemas, que te
concentres en el aquí y ahora, relaja tu cuerpo y tu mente, y te ayuda a pensar
con más claridad cuando se presenta un problema sin importar si es demasiado
grande o demasiado pequeño.
Empieza hoy mismo a practicar algunas posturas básicas de yoga en tu
casa y verás los beneficios desde el primer día. Ni siquiera hace falta que
gastes dinero en apuntarte a una clase.
Entra en YouTube y busca vídeos de yoga para principiantes, y audios
de meditación para escucharlos por la noche en tu cama antes de irte a dormir.
Practícalo al principio dos o tres veces por semana, y enseguida verás
todos los beneficios que te aportará esta práctica milenaria.
2. VALÓRATE COMO TE MERECES
A menudo, cuando nos sentimos frustrados o enfadados, sólo nos
concentramos en las cosas malas o los errores que hemos cometidos en vez de
valorar aquello que hemos hecho bien.
No te castigues por tus fallos: permítete reconocer el valor que
tienes y mira todo lo que has conseguido hasta ahora.
3. SONRÍE
Sonreír es una de las cosas más importantes que solemos olvidar hacer
cuando pasamos por épocas de estrés y preocupación.
Está demostrado científicamente que este simple gesto libera dopamina
y serotonina, los responsables de hacernos sentir tranquilos y felices, además
de aumentar la confianza en uno mismo, reducir la ansiedad, e incluso limpiar
los pulmones.
Puedes forzarte a sonreír haciendo la mueca en tu cara, o mejor aún:
mira algún vídeo, película, o libro ¡que te haga partirte de risa!
4. PERDÓNATE A TI MISMO
Golpearte emocionalmente por lo que ha salido mal, pensando que es tu
culpa, no hará que las cosas cambien.
Si quieres tener una mente positiva debes empezar por ti mismo,
perdonándote por tus errores y permitiéndote seguir adelante.
5. RODÉATE DE GENTE POSITIVA
No hay nada que bloquee más la mente positiva que estar acompañado de
personas tóxicas.
Cuando estés atrapado en una espiral de negatividad, habla con gente
que pueda ponerte en perspectiva y que no te alimente con sus malos
pensamientos.
6. VISUALÍZATE COMO DESEAS SER
Las visualizaciones son poderosas herramientas que te ayudarán a
cambiar tu mente (y el modo en que ves las cosas) de forma sencilla y poderosa.
Yo suelo hacerlas por la noche, antes de dormir, tumbada en mi cama, y
respirando tranquilamente hasta estar calmada y relajada.
Una vez en este estado, me imagino a mí misma con todo el detalle
posible cómo me gustaría ser, o en una situación y cómo desearía actuar frente
a ella.
7. CAMBIA TUS PENSAMIENTOS
NEGATIVOS POR OTROS POSITIVOS
En vez de pensar cosas como “voy a pasarlo mal teniendo que adaptarme
a mi nueva situación”, cambiálo por pensamientos más positivos como “voy a
tener que enfrentarme a algunos retos, pero encontraré soluciones que lo
arreglen para vivir más feliz”.
Sé que puede resultarte difícil hacer esto al principio si no estás
acostumbrado a practicarlo; y por eso te propongo un ejercicio muy sencillo que
te ayudará a conseguirlo más fácilmente.
Recorta unos trozos de papel como si fuesen tarjetas. En cada uno de
ellos, escribe el pensamiento negativo que te se venga a la mente en ese
momento, y por el reverso, escribe el pensamiento positivo que le corresponda.
Guarda esas tarjetas de papel en un monedero, un bolsillo o en tu
bolso para llevarlas siempre contigo y, cada vez que pienses una de esas frases
negativas, saca tus tarjetas y lee las frases positivas.
A mí me ha ayudado mucho esta técnica para superar momentos de gran
ansiedad y preocupación que he sufrido en ciertas épocas de mi vida.
8. RELÁJATE Y DEJA QUE LAS
COSAS SUCEDAN
A veces, el mejor modo de lidiar con los problemas es relajarte y
dejar que las cosas sigan su camino.
En muchas ocasiones las cosas pueden parecer más grandes de lo que en
realidad son; y recordarte esto puede suponer un gran alivio para ayudarte a
estar más tranquilo y tener una mente más positiva.
9. ¡NO TE HAGAS LA VÍCTIMA!
Si constantemente te estás victimizando y pensando que lo que te pasa
es porque culpa de tu situación, de otras personas, o de la vida en general, lo
único que conseguirás es alimentar tu negatividad.
Y lo que es peor: mientras estés llorando por lo que te pasa y
quejándote por lo mal que te ha tratado la vida no te moverás del lugar en el
que estás.
Incluso aunque tu situación te parezca imposible de superar, siempre
hay una salida, una solución al problema. Siempre podrás elegir hacer un cambio
si es necesario, pero debes ser positivo y pasar a la acción para conseguirlo.
10. CREA UN MANTRA PERSONAL
Un mantra es una frase poderosa que puedes crear tú o tomarla de algún
texto o persona que admires, y que al decirla te haga sentir mejor, más
motivado y más positivo.
Lo importante es que estas palabras tengan un verdadero significado
para ti, y te ayuden al repetirlas a sentir la fuerza que llevas en tu
interior.
11. AYUDA A ALGUIEN
Para activar tu mente positiva debes dejar de centrarte siempre en ti,
y en ocasiones ayudar a alguien también.
Yo suelo hacer pequeñas campañas de recogida de alimentos en mi ciudad
para donarlos a organizaciones solidarias. Con eso consigo olvidarme de algunos
de mis problemas, y sentirme bien por estar ayudando a alguien.
Empieza por cosas pequeñas, como ayudar a un amigo con una mudanza o
llevar las bolsas de la compra de tu vecino anciano a su casa, y notarás que
cuando te acuestes en tu cama sentirás una gran satisfacción en tu interior.
12. RECUERDA QUE NADIE ES
PERFECTO, NI SIQUIERA TÚ
Este es un problema con el que he tenido que tratar durante muchos
años. Quería hacer todo perfecto, que todo en lo que me involucraba saliese
perfecto.
Pero sólo logré hacerme sentir a mí misma más desgraciada y llenarme
de negatividad cada vez que algo no era como yo quería. Me sentía mal por cada
error que cometía, incluso los más pequeños.
Hasta que al fin aprendí que todos cometemos fallos, y que lo único
que se puede hacer es aprender de ellos y seguir adelante.
No quiero malgastar mis días pensando constantemente en qué he hecho
mal y obsesionándome con cómo podría hacerlo mejor; y seguro que tú tampoco
quieres castigarte de esa forma.
13. ¡CANTA!
¿Sabías que cantar tiene un efecto calmante, entrena tu memoria y tu
atención, disminuye el dolor emocional, e incluso fortalece el músculo de tu
corazón?
Está comprobado científicamente que cantar alivia enormemente el
estrés y nos hace tener una mente positiva porque con ese acto mostramos
nuestras emociones, y el cerebro libera todas las tensiones que tenemos.
Así que aunque cantes tan mal como lo hago yo, pon tu canción favorita
en el ordenador o en tu smartphone, y empieza a tararearla como si en el mundo
sólo estuvieses tú y esa melodía.
14. ESCRIBE 10 COSAS POR LAS
QUE ESTÁS AGRADECIDO
Ser agradecido te ayudará a apreciar lo que ya tienes, y activará tu
mente positiva de formas que ni te imaginabas.
Coge un papel y lápiz y escribe entre 5 y 10 cosas por las que das las
gracias de tener en tu vida todos los días, y cuelga esa lista en algún sitio
visible por el que pases a diario.
15. ¡CREE EN TI MISMO!
¿Quieres ascender en tu empleo? ¿Crear tu propio negocio para mejorar
tu vida? ¿Ser mejor persona con una actitud positiva?
Cree en ti mismo, en las capacidades que tienes para coseguirlo, y
todo lo que te propongas se hará realidad.
16. LEE FRASES POSITIVAS
Me gusta poner post – it adhesivos con frases positivas en mi mesa de
ordenador, en la puerta de mi refrigerador, y en las paredes de mi habitación
para recordarme que debo tener una mente positiva pase lo que pase.
No hay comentarios:
Publicar un comentario